Bait

Jasper y Bristol son dos criminales que llevan a cabo un robo en la Reserva Federal llevándose cuarenta y tres millones de dólares en oro y dejando tras de sí a varios agentes de policía muertos. Pero Jasper acaba siendo encarcelado y comparte celda con Alvin Sanders, un ladrón de poca monta que ha robado una partida de langostinos. Tras sufrir un ataque al corazón, Jasper le da a Alvin un mensaje en clave para su mujer. Con la esperanza de recomponer su relación con su novia Lisa y convertirse en un hombre de bien, Alvin se ve de nuevo en la calle como cebo del FBI, cuyos agentes esperan que sirva de guía para frenar un asalto planeado para robar el oro de la Reserva Federal de los Estados Unidos. Atrapado entre detectives, criminales y sus propios familiares, comienza a creer que tal vez estaba mucho mejor tras las rejas.